sábado, 30 de septiembre de 2000

ANTANANARIVO

Madagascar era la cuarta isla más grande del mundo, después de Australia, Islandia y Borneo. Estaba situada frente a las costas de Mozambique, en pleno Océano Índico. Viajamos en el año 2000  y comprobamos que era un país africano diferente y con muchos atractivos. Antananarivo, abreviada Tana, era la capital de Madagascar. La ciudad estaba construida sobre varias colinas alrededor del Lago Anosy.

El Lago Anosy estaba precioso, bordeado por jacarandos de flores lilas, algunos sauces llorones y otros altos árboles Se veía basura en las orillas, pero no las cantidades que vimos en los viajes posteriores que hicieron otros amigos. En el centro tenía una isla  con un Monumento a los combatientes de la I Guerra Mundial. Accedimos a la isla por un puente, y contemplamos la ciudad desde el centro del lago.



Desde el Parque de la Plaza de la Independencia había buenas vistas. Bajamos un montón de escaleras hasta llegar al Mercado Zoma. Antes era mucho más grande con cientos de puestes con parasoles. Pero por la inseguridad los habían reducido bajo la estructura del mercado, con tejadillos triangulares. Había mucha animación y se vendía de todo. La población local, los malgaches, nos sonreían y nos ofrecieron vainilla y especies, mango, fósiles, o piedras semipreciosas. En el Mercado de Anchove estaban las tiendas de artesanía.





En una colina estaba el antiguo Palacio de Rova, el Palacio de la reina. Fue quemado en 1995 en las protestas de las elecciones y solo se conservaba la estructura externa, un cuadrilátero con ventanas arqueadas y cuatro torres en los extremos.

Otro Palacio cercano fue la Residencia del Primer Ministro. Esta reconvertido en Museo y se exhibían colecciones de objetos que se salvaron del incendio y algunas fotografías antiguas. Estaba el Trono de la Reina, su palanquín, su corona y ornamentos, joyas, sables labrados, fotos de las reinas sucesivas, los embajadores en el extranjero y el Tratado de paz con los franceses después de la guerra. Fue una visita interesante.

Bajo el protectorado francés, entre 1882 y 1897, se abolieron la esclavitud, las castas y la monarquía. La última reina de Madagascar fue Ranavolona IIISe conservaban restos de la época colonial francesa, como el bonito edificio de la Estacion de Ferrocarril Soarano con un reloj central o la Catedral Católica de Andohalo, del s. XIX y dedicada a la Inmaculada Concepción. Era de arquitectura románica, con dos torres laterales.



(Foto cortesía de wikimedia)