domingo, 28 de enero de 2018
EL MERCADO DE GANADO
jueves, 24 de mayo de 2012
UN POBLADO HIMBA
martes, 13 de octubre de 1998
EL MERCADO DE DIMEKA
Cada día en el viaje por Etiopía parecía superar al anterior. Y aquel día en la ruta por el sur, cerca del río Omo, fue especial. Desde Konso y Weyto fuimos al mercado de Dimeka. Por el camino vimos a los primeros Hamer, una etnia que conservaba su indumentaria tradicional tribal. Las mujeres llevaban pequeñas trencitas colgando en una melena corta, y untadas con una pasta rojiza, elaborada con grasa y el colorante que obtenían de machacar las cochinillas., según nos dijeron, aunque también mezclaban barro con grasas animales. Era similar a los Himbas de Namibia.
Usaban pendientes diversos horadando los lóbulos de las orejas, y a veces unos simples tronquitos. Los collares y bandas ornamentales de varias hileras de cauris, las conchas africanas, tapaban a medias los pechos de las mujeres. Una mujer llevaba colgada una llave, no sabíamos si abriría algo o era decorativa. Vestían una falda hecha de pieles con adornos de abalorios de colores. Una vestimenta que apenas había variado en siglos.
Algunos hombres tenían
escarificaciones y también llevaban collares, brazaletes y el pelo trenzado, o usaban
sombreros peculiares. La decoración de sus cuerpos era reflejo de status social.
En el mercado de Dimeka la gente estaba ocupada con sus tareas, la mayoría sentadas en el suelo terroso, ofreciendo sus productos.. Utilizaban las calabazas como recipientes para la leche, cereales de distintos tipos o mantequilla. Vimos un hombre saciando su sed, bebiendo directamente de la calabaza. También vendían gallos vivos, tubérculos o bananas; compramos un racimo de diez bananas por 1 birr, la moneda etíope. Al lado había otro mercado de ganado, con vacas, bueyes y cabras. Los Hamer se dedicaban a la agricultura y al pastoreo. Más que las mercancías en sí, no nos cansábamos de ver el ambiente y la indumentaria de la gente. Fue un viaje en el tiempo.